Covid-19 Seguridad y Trabajo

Cuando hablamos de capacitar o formar, estamos hablando de aprendizaje, entonces comencemos por ahí.

Se ha definido y explicado el aprendizaje a lo largo de la historia de diversas formas, utilicemos dos conceptos, uno  clásico y otro  moderno.

Un autor clásico que fue revelador por sus aportes es Jean Piaget, y nos dice que el aprendizaje es “….es un proceso donde el sujeto, a través de la experiencia, la manipulación de objetos, la interacción con las personas, genera o construye conocimiento, modificando, en forma activa sus esquemas en relación al mundo que lo rodea…”

Un autor más moderno o contemporáneo, como es Paulo Freire, en el encontramos ideas muy fuertes en cuanto al aprendizaje,”…el aprendizaje se da en un entorno dialectico, en el espacio de aprender, se da en un ida y vuelta…”

Ambos autores tienen aportes muy importantes, que han cambiado la forma de entender el aprendizaje, pero si algo he de destacar, es la necesidad de integrar al otro, en ese acto de aprender, no como un mero receptor de la información, sino por el contrario, en un receptor pero también un emisor de información, que debemos rescatar para construir un aprendizaje, que sea significativo para ambas partes.

¿De qué hablamos cuando hablamos de formar y capacitar?

En líneas generales, el concepto de formar, parece indicar, a un proceso de complejidad alta, que integra varias etapas y necesita un desarrollo mayor en el tiempo y que puede tener varios objetivos, como puede ser una formación académica.

En cuanto al concepto de capacitación, también es un proceso complejo, que tiene diversas etapas, pero integra objetivos más específicos y concretos, como puede ser capacitar a un grupo en el manejo de equipos de protección personal.

Con estos conceptos vamos desarmando ese proceso de aprendizaje y adquisición de conocimiento.

Vamos en la búsqueda de respuestas, o de más incógnitas.

¿Cuánto se logra en las capacitaciones?

Esa pregunta como lo mencione al inicio, es el motor de este post.

Creo que el inicio de la respuesta comienza, por comprender que objetivos nos proponemos, vamos a brindar solo información?, vamos a contemplar las necesidades de los receptores?, intentaremos de ida y vuelta?, etc.

Primero definamos el objetivo, estoy convencido que uno elige los objetivos, pero los pule con el otro, al que nos enfrentamos.

No dudemos del otro, de lo que nos puede brindar, esa información en valiosa, nos va ayudar a entender sus necesidades y así dejar conceptos que sean más amigables con su realidad laboral.

Es necesario dejar información, pero no todo lo importante esta en los datos, unamos datos con realidad, hagamos participe a los receptores.